El Tribunal Supremo, en su sentencia 5519/2024, de 11 de noviembre, ha vuelto a pronunciarse sobre un tema muy frecuente en los procesos de divorcio: qué ocurre con la vivienda familiar cuando se establece una custodia compartida.
⚖️ El caso
Una pareja, con un hijo en común, se divorció tras varios años de convivencia. El juzgado de primera instancia acordó la custodia compartida, pero atribuyó el uso de la vivienda familiar a la madre y al menor hasta la mayoría de edad del hijo.
El padre recurrió esta decisión, argumentando que, al ser la custodia compartida, no resultaba justo ni equilibrado que uno de los progenitores disfrutara de la vivienda durante tantos años, impidiéndole el acceso a un bien que pertenecía a ambos.
👩⚖️ Qué dice el Tribunal Supremo
El Alto Tribunal da la razón al padre en parte, y fija doctrina clara:
En los casos de custodia compartida, la atribución del uso de la vivienda familiar no puede extenderse indefinidamente, sino que debe establecerse por un tiempo limitado y razonable.
En este caso concreto, el Supremo considera que mantener el uso exclusivo de la vivienda a favor de la madre hasta la mayoría de edad del hijo —nueve años más— era desproporcionado, ya que ambos progenitores tenían ingresos y responsabilidades similares.
Por ello, el tribunal acuerda que la madre podrá seguir utilizando la vivienda familiar solo durante un año más desde la fecha de la sentencia. Ese plazo se considera prudencial, para permitirle reorganizar su situación y buscar una alternativa habitacional.
📜 La doctrina que consolida el Supremo
El Tribunal recuerda que el artículo 96 del Código Civil no regula expresamente qué hacer cuando hay custodia compartida, por lo que debe aplicarse por analogía lo previsto para otros supuestos, atendiendo al interés más necesitado de protección.
Esto significa que el juez valorará:
- Quién de los progenitores tiene menores recursos económicos.
- A quién pertenece la vivienda (si es común o privativa).
- Y siempre, que el uso se otorgue con un límite temporal razonable.
El Supremo cita otras resoluciones recientes que establecen plazos de entre uno y tres años, según las circunstancias del caso, o hasta la liquidación del régimen económico matrimonial cuando proceda.
💬 En resumen
- En custodia compartida, el uso de la vivienda familiar no es indefinido.
- Solo se otorga temporalmente, y debe estar justificado en el interés más necesitado de protección.
- Una vez transcurrido ese plazo, deberá resolverse la liquidación del régimen económico o buscarse una solución habitacional alternativa.
🌿 Reflexión final
Esta sentencia refuerza la tendencia del Tribunal Supremo hacia una mayor equidad en los casos de custodia compartida, evitando situaciones que puedan generar desequilibrio o conflicto prolongado entre progenitores.
Cada caso es distinto, y la decisión sobre el uso del domicilio familiar debe tomarse siempre desde el interés del menor, pero también respetando los derechos y las circunstancias económicas de ambos padres.
Si estás atravesando un proceso de divorcio y tienes dudas sobre la custodia compartida o el uso de la vivienda familiar, puedo ayudarte a valorar las opciones legales más adecuadas para tu situación.
